Autor: Silvia García Ruíz
Páginas: 198
Editorial (sello): Zafiro (eBook)
Sinopsis:
Año 1975. Sarah Robinson es una buena chica que siempre obedece a sus padres. Con diecisiete años, intenta adaptarse al modelo que establece su madre sobre lo que es la mujer ideal. Según éste, una agraciada ama de casa de medidas perfectas es lo más adecuado para pescar un buen marido. Pero Sarah no encaja en ese molde y hay una parte dentro de ella que quiere rebelarse. Y comenzará a mostrar su verdadero carácter ese verano, en el que, mientras ella ansía conseguir al chico elegido por sus padres, del que se cree enamorada, un joven agitador se cruzará en su camino y le mostrará de todo lo que es capaz.
John Lowell tiene muy claro lo que no quiere hacer en la vida: parecerse a su padre. Así pues, a sus dieciocho años decide plantarse y, con su desaliñado aspecto, su ruidosa motocicleta y sus atrevidas apuestas, llegará al aburrido pueblo de Whiterlande, donde logrará que todo cambie. Allí conocerá a la «recatada» Sarah Robinson, a la que provocará continuamente para sacar a relucir a la osada mujer que esconde en su interior, la única capaz de seguirlo en su juego. El inconveniente es que, mientras que John se ha fijado en Sarah, ella sólo tiene ojos para el chico perfecto al que nunca ha dejado de perseguir.
¿Conseguirá John ser tan afortunado en el amor como en el juego? ¿Apostará finalmente Sarah por él? Descubre en esta historia cómo las locuras de un amor de verano pueden convertirse en algo más…
Ya voy avanzando con mi reseñas, podemos restar una...
En este caso cuando descubrí este libro, al principio me deje guiar por el hecho de que en Goodreads lo presentan como un tomo autoconclusivo, pero si ponemos atención nos daremos cuenta de que es la historia de los padres de los Hermanos Lowell de "Mi Perfecto Sapo Azul" (libro de Elizabeth), "Una Heredera con Muy Malas Pulgas" (Libro de Dan), y "Mi Príncipe Canalla" (Libro de Josh).
En este caso la sinopsis es muy clara, tenemos a la típica chica "buena" que hace todo cuanto sus padres le pide y por otro lado tenemos al Chico "malo" que se la pasa metiéndose en problemas y todo eso.
Tenemos a Sarah, una joven a la que le han metido en la cabeza que el ideal de la mujer es una figura delgada que le ayude a atraer al hombre “perfecto”, además de que siempre se espera de ella una conducta intachable con modelos que rondan a la etiqueta inglesa, que coma solo lo necesario, y que ante todo cuide sus antojos por chocolate. Su mamá la viste a su gusto, la humilla por su talla, por no “arreglarse lo suficiente” y la compara constantemente con otras chicas delgaduchas o de la farándula.
Ese verano, la mamá de Sarah tiene planeado visitar a la familia Lowell, debido a que el hijo de la familia tiene un “futuro prometedor” y es “el mejor partido del mundo”, quitando que es guapo, educado y puede aportar un gran apoyo económico a la vida de Sarah.
Siendo sinceros Sarah ha estado enamorada de Kenneth, el chico de sus sueños pero que nunca ha volteado a verla de la forma que ella espera, pues este chico “perfecto” sólo la ve como una hermana menor a la que proteger, pero este verano Sarah está decidida a seguir todos y cada uno de los consejos de su “sabia” madre para poder ganarse el corazón de su chico ideal.
El problema es que Sarah no contaba con la llegada del alocado Jonh, que es el primo desastroso de Kenneth. John tiene una mente privilegiada que le permite memorizar cada artículo que lee, y ese atributo es un desperdicio según su propio padre, pues John ha decidido posponer la universidad para “encontrar su propio camino”.
El caso es que ambos protagonistas tienen un carácter temible, y se desatara una guerra entre los Lowell para ganar el corazón de la no tan tímida y completamente real Sarah que ese verano se ha presentado ante su puerta.
Me encantó el argumento real de la autora, pues nos topamos con una generación que está siendo manipulada por sus padres, que han estado viviendo la vida que sus progenitores deseaban para sí, y me encantó la protesta que todos armaron, y el apoyo que se les brinda al final, de verdad fue lo mejor.
Otra parte que me encantó de la historia, fue que pude identificarme plenamente con Sarah, pues ella tiene que soportar un montón de críticas por su figura, por su amor al chocolate y a los postres, además de que se le presiona para que sea toda una “damita”; por entrar en chisme les diré que de pequeña a mí se me trató de hecho como la “gordita chistosa” de ambas partes de mi familia y esto duró años, de hecho sigo teniendo un poco de recelo hacia la figura de mi cuerpo, pero es algo en lo que he estado trabajando poco a poco; pero el toparse con un personaje tan real es genial y sí me sentí bien con una chica que este afrontando esto y se arme de valor para demostrar que es más de lo que todos dicen.
Me encantó este libro en pocas palabras, es una cosa preciosa para pasar el rato y que creo que da un mensaje claro sobre los estereotipos que hasta la fecha siguen tan vigentes y dañan a muchas chicas y chicos. También te da un mensaje muy bonito sobre el amor, porque es un libro romántico obviamente, y me encanta que se pueda ver que no sólo va de chico a chica, sino también entre la familia, la lealtad que hay cuando tenemos problemas.
Realmente es un libro genial para leer, creo en lo personal que si planean leer la saga de “Los Hermanos Lowell”, sin duda alguna deben de leer este, pues te da muchas pistas y explica muchas cosas que veremos más adelante en los siguientes libros.
A este libro le dí 5/5 Estrellas y ¡no me arrepiento de nada! Deseo re leerlo de nuevo.
